Anochecer

Hoy sin rollos previos que el siguiente poema es extenso. 

ANOCHECER

Desde un anochecer tranquilo

arribé mi barco al noray de tu corazón,

guiado por la luz de tu esplendor.

Descubrí, tu alma hecha de amor,

y sintiéndome como un dios

me quise quedar en tu paraíso.

En él, mi corazón, creció pletórico,

cubriendo de flores todo tu universo.

Alimentado de risas, llantos, amores,

sueños, deseos vividos segundo a segundo,

miedos, alegrías, luces y oscuridades.

Juntos compartimos la magia de la noche,

jugando con palabras de amor.

Noches de abrazos sentidos sin tocar,

de besos dados sin besar;

alma con alma, espíritu con espíritu.

Nuestras soledades mil veces murieron

y como Ave Fénix a  la vida volvieron.

El mar, el cielo, el sol, y la luna

eran nuestros cómplices compañeros,

en la isla donde tú eras arena y yo ola,

amándonos en un amor continuo.

Más tanta belleza, tanto amor,

despertó las iras de la noche de la tormenta,

y fuimos atacados violentamente,

sin piedad, por los celos, miedos y envidias,

venciéndonos como el rayo vence al árbol.

Náufrago y solo en la tormenta me quedé,

sin tu cobijo, sin tu luz, sin tu sonrisa,

en el alta mar del vacío.

Solo, frío, asustado con rumbo al final.

Me acompaña el recuerdo dulce de tu voz,

y aquellos que en sueños quedan.

El frío me llena, se apaga mi luz...

...Me faltas tú.

Y para acompañarlo, una canción de mis favoritas. El gran Fito y su "Soldadito Marinero". Disfrutar de la música, la letra y el poema con vino y rosas rojas. Besos y abrazos.